




El olor a café y el entusiasmo después de tanto tiempo sin escuchar y contar, nutrieron el ambiente de Mussac haciendo del atardecer un genial encuentro tan cálido como siempre. Una mágica ocasión donde unidos a Inés Bombara y a los amigos de A PLENA VOZ, compartimos la alegría de dar y recibir, porque mientras haya algo para contar, siempre habrá alguien que quiera escuchar.Algunas fotis del espectáculo.
¡Gracias por la generosa invitación Inés!
¡Bravo, amigos! ¡Qué bueno entibiar al amparo de los cuentos las tardecitas frías de este invierno!
ResponderEliminarUn abrazo.
Ana
No hay nada mejor que un cuento para entibiar el alma.
ResponderEliminarBesos!