Un dìa varias voces descubrimos que muchas inquietudes nos vinculaban con los demàs y con la vida. Así, empezamos a contar cuentos a esa oreja verde que todos llevamos, la que nos permite, segùn Gianni Rodari, "escuchar aquello que ya adultos no nos detenemos a escuchar".Hoy cada voz tomó un rumbo propio. Queda aquí encendido entre historias y también melodías, aquel fuego que los amantes de la narración saben que es generoso y sagrado, para quien quiera esuchar o contar..¡Bienvenido!
queridos amigos
ResponderEliminares un placer tenerlos de visita en mi zigurat.
que tengan un buen año!
(si algo tiene de malo vivir fuera de Buenos Aires, es no poder asistir a sus tertulias)
Besos*